La Primera Dama de la República Cándida Montilla de Medina encabezó el acto de entrega de certificados a 45 participantes en el diplomado “La Educación Inclusiva: Camino para un Aprendizaje Transformador en el Centro Educativo”.
Este diplomado es el segundo que auspicia el Despacho de la Primera Dama y se llevó a cabo en el Centro de Atención Integral para la Discapacidad (CAID), en esta ciudad.
El primero, titulado “Construyendo Caminos para Aprender en una Escuela Inclusiva”, fue realizado en el CAID-Santo Domingo Oeste, con la participación de 39 profesionales del área educativa, psicológica y terapéutica.
En la impartición del Diplomado, intervienen junto al Despacho de la Primera Dama, las Fundaciones Mapfre y la InteRed, así como el Centro Cultural Poveda, el Instituto Superior de Estudios Educativos Pedro Poveda y el Ministerio de Educación.
En esta oportunidad, 45 maestras, psicólogas, orientadoras y terapeutas de la región norte recibieron sus certificados, lo que eleva a 84 el número de profesionales que ha participado en esta actividad académica para la inclusión.
El diplomado está enfocado en propiciar la cultura de la inclusión social, para cambiar prácticas y contribuir con una educación para todos, sin distinción de ningún tipo.
Al pronunciar las palabras centrales del acto, Montilla de Medina expuso que en el país se producen esfuerzos por lograr una educación que responda a los valores de la inclusión, la igualdad y el respeto a la dignidad.
Aseguró que una prueba de ello son las estrategias desarrolladas por el Ministerio de Educación de abrir aulas en escuelas regulares para la población con discapacidad y en el fortalecimiento de los Centros de Atención a la Diversidad (CAD) en las regionales.
Una visión inclusiva
“El modelo educativo que propugna esta visión que desarrolla el MINERD es aquel que no discrimina, sino que incluye. Es decir, que no establece diferencias entre los educandos en razón de sus habilidades, situación socioeconómica, cultural, religiosa o cualquier otra particularidad”.
“El modelo educativo que propugna esta visión que desarrolla el MINERD es aquel que no discrimina, sino que incluye. Es decir, que no establece diferencias entre los educandos en razón de sus habilidades, situación socioeconómica, cultural, religiosa o cualquier otra particularidad”.
Montilla de Medina consideró necesario seguir abandonando viejas prácticas y sustituir visiones erradas y prejuiciadas por un enfoque pedagógico que aliente la igualdad y el respeto a la dignidad de las personas.
A juicio de la Primera Dama de la República, la escuela está llamada a ser un espacio de igualdad y equidad.
Dijo que, por tal razón, el Despacho y el Centro de Atención Integral a la Discapacidad (CAID) fomentan una nueva visión de la educación y alientan las iniciativas tendentes a lograr ese objetivo.
“Confío plenamente en que todas ustedes pondrán sus conocimientos al servicio de esta causa de justicia a favor de la cual ya se realizan tantos hermosos esfuerzos, es decir, el trato igualitario de todos los seres humanos”, expuso Montilla de Medina, generando fuertes aplausos entre los presentes.
La investidura de las 45 diplomadas en Educación Inclusiva se constituyó en un acto de compromiso.
Reafirmó la voluntad de distintas instituciones, tanto gubernamentales como de la sociedad civil, de trabajar unidos por la igualdad, la equidad y la justicia social.
Reafirmó la voluntad de distintas instituciones, tanto gubernamentales como de la sociedad civil, de trabajar unidos por la igualdad, la equidad y la justicia social.
Además de la Primera Dama Montilla de Medina, en el acto hablaron los representantes de la Fundación Mapfre, del Instituto Superior de Estudios Educativos Pedro Poveda; del Centro Cultural Poveda y del Ministerio de Educación de la República Dominicana.
También una de las graduandas agradeció la iniciativa de formar a los profesionales en la aplicación de la educación inclusiva, en el país.
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