Mientras que la Fiscalía del Distrito Nacional anuncia que apelará la decisión el Segundo Tribunal Colegiado del Juzgado de Primera Instancia del Distrito Nacional, que dispuso la libertad del hombre acusado de cercenar las manos y provocarle otros daños físicos sólo porque ella se negaba a volver con él, el 25 de noviembre del 2005, Dolfi Angelina González, la joven esposa, , mostró este miércoles su preocupación por el dictamen de una jueza que varió de prisión preventiva a garantía económica las medidas de coerción contra el macho agresor.
“Yo no entiendo. Los jueces también tienen familia. Ella es una mujer. Si pudiera decirle algo a la jueza, con todo respeto, le pediría que me ayude. Le diría que si a él lo sueltan, me mata. Un juez entendería eso ¿usted no cree?”, razona Dolfi, dejando interrogantes que no parecen encontrar respuestas.
La doctora Catalina Bueno, fiscal adjunta, adscrita a la Unidad de Atención y Prevención de Violencia de Género, que lleva el caso, expresó que el Ministerio Público, continuará la línea que ha seguido desde el principio frente a la agresión de que fue víctima Dolfi Angeline González Valdez, de 19 años de edad, a quien Gregorio Martínez Cuevas, de 24 años de edad, le amputó las manos.
El hecho ocurrió en el callejón H del sector Los Praditos, en la capital, la Unidad de Atención y Prevención de Violencia de Género inició de inmediato las investigaciones y al día siguiente obtuvo una orden de arresto.
El Ministerio Público presentó querella formal en contra del imputado el 14 de febrero del pasado año 2006, dos meses y nueve días antes de cumplirse el plazo previsto en el artículo 150 del Código Procesal Penal, según el cual la investigación puede extenderse hasta por tres meses, luego de dictada prisión preventiva, como medida de coerción.
El imputado Martínez Cuevas está acusado de violar los artículos 2, 295, 296 y 297 del Código Procesal Penal, que tipifican y sancionan el intento de asesinato, así como el artículo 309, en su literal B, de la misma legislación, modificada por la Ley 24-97 sobre Violencia de Género e Intrafamiliar.
Martínez Cuevas también está acusado de violación al artículo 50 de la Ley 36 sobre Porte, Comercio y Tenencia de Armas, en perjuicio de la víctima Dolfi Angeline González Valdez.
Luego de varias audiencias, suspendidas por razones diversas, el pasado día 9 de marzo del presente año 2007, el Segundo Tribunal Colegiado conoció una de revisión de las medidas de coerción, a solicitud de las partes, en la cual dispuso la variación de la prisión preventiva por una garantía económica de RD$ 7,0000000.00 (Siete millones de pesos) contra el imputado.
Luego de varias audiencias, suspendidas por razones diversas, el pasado día 9 de marzo del presente año 2007, el Segundo Tribunal Colegiado conoció una de revisión de las medidas de coerción, a solicitud de las partes, en la cual dispuso la variación de la prisión preventiva por una garantía económica de RD$ 7,0000000.00 (Siete millones de pesos) contra el imputado.
González, de 20 años, se aferra a la esperanza de que el hombre que intentó matarla, Gregorio Martínez Cuevas (Eli), no alcance reunir los 7 millones de pesos necesarios para alcanzar su libertad. "Yo creo, sinceramente, que él no podrá reunir esos siete millones de pesos. Pero si los reúne y sale, me mata”.
“Yo no entiendo. Los jueces también tienen familia. Ella es una mujer. Si pudiera decirle algo a la jueza, con todo respeto, le pediría que me ayude. Le diría que si a él lo sueltan, me mata. Un juez entendería eso ¿usted no cree?”, razona Dolfi, dejando interrogantes que no parecen encontrar respuestas.
Para dejar en libertad a Martínez Cuevas, de 27 años, la jueza valoró el artículo 241 del Código Procesal Penal que establece que “la prisión preventiva finaliza cuando (…) su duración exceda los doce meses”. La magistrado consideró que pese a que “la Fiscalía se opone por la gravedad de la acusación”, corresponde al juez “en su interpretación de la norma establecer un equilibrio para el imputado, la víctima y los querellantes”.
En su caso Dolfi Angelina González, madre de un niño de tres años fue agredida a machetazos por su ex marido al negarse a reconciliarse con él. Para entonces, González había decidido romper definitivamente con Martínez Cuevas, quien le había perseguido constantemente, llegando a secuestrarla, violarla y hasta a torturarla. Pese que por aquellos días visitó varias instancias (la Fiscalía que existía en Villa Juana y la Policía) no encontró eco a sus denuncias ni una mano amiga que se apiadara de su situación.
Además de los maltratos que sufría de su ex pareja, tenía que dedicarse a mantener sola a su hijo, porque el padre no aportaba para la manutención.
La noche del 25 de noviembre de 2005, cuando el mundo conmemora el Día Mundial de la no Violencia Contra la Mujer, su ex marido la agredió cuando salía de su trabajo en un salón de belleza. Martínez Cuevas le asestó varios machetazos, dos de los cuales lograron amputarle sus dos manos. En una cirugía que se prolongó por 14 horas los médicos del hospital Salvador B. Gautier lograron, con éxito, reimplantarle sus dos manos. A ello hay que agregar las heridas en la cabeza hombros y brazos.
La noche del 25 de noviembre de 2005, cuando el mundo conmemora el Día Mundial de la no Violencia Contra la Mujer, su ex marido la agredió cuando salía de su trabajo en un salón de belleza. Martínez Cuevas le asestó varios machetazos, dos de los cuales lograron amputarle sus dos manos. En una cirugía que se prolongó por 14 horas los médicos del hospital Salvador B. Gautier lograron, con éxito, reimplantarle sus dos manos. A ello hay que agregar las heridas en la cabeza hombros y brazos.
Dofi se encuentra bajo tratamiento psicológico y asiste a terapias para recuperar la movilidad de sus manos. Aunque logra pequeños movimientos para ayudar en su aseo personal, por ejemplo, la mayoría de los actos cotidianos no están a su alcance. Mientras se le entrevistaba alguien le habló de la necesidad de que tuviese un celular, sugerencia a la que ella respondió una mezcla de interrogantes y pesares: ¿Y cómo voy a abrirlo?, ¿cómo lo agarro?.
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