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La periodista Aodeliza Solano, quien fue golpeada y amenazada de muerte ayer por tres desconocidos. Ella solicitó hoy protección a las autoridades. Dos mujeres y un hombre la golpearon cuando llegaba a su oficina del edificio Galerías Comerciales.

Periodista denuncia la golpean y amenazan

Escrito por: Shira Abreu
Tomado de El Nacional

Desconocidos golpearon y amenazaron de muerte ayer a la periodista y locutora Aodeliza Solano cuando llegaba a su oficina, en el edificio Galerías Comerciales, de la avenida 27 de Febrero, próximo a las 6:00 de la tarde.

Solano, quien conduce el programa “En sintonía con el pueblo", que se transmite por Telefuturo, canal 23, a las 4:30 de la tarde de lunes a viernes, solicitó hoy protección de las autoridades porque la amenazaron de muerte públicamente.

La comunicadora expresó en la redacción de El Nacional que sus agresores fueron un hombre y dos mujeres que la abordaron cuando entraba por la puerta que da acceso al parqueo del edificio.

“Me atacaron y estoy toda adolorida... tengo no sólo arañazos, estoy todo golpeada, me duelen las costillas, la cabeza, me agarraron por la cabeza, me hicieron amenazas de muerte”, dijo Solano, quien esta mañana también hizo la denuncia en el programa de radio “En primera fila”, que conduce en Fiesta FM, de 7:00 a 9:00 de la mañana, de lunes a viernes.

Detalló que no se trató de un intento de asalto. Sus agresores no le robaron nada.

“Necesito que mi familia sepa que hasta ahora no tengo enemigos, que a lo que me dedico es a hacer obras sociales, pero uno nunca sabe. Por eso quiero que todo conste para que a partir de ahora, como esas personas públicamente me amenazaron de muerte, que eso conste para que mis familiares, en caso de que pase lo peor, sepan por dónde empezar a investigar”, dijo.

La comunicadora destacó que no sabe quién puede estar interesado en hacerle daño y que tampoco conoce qué interés pudo afectar con alguno de sus trabajos periodísticos.

“No tengo, que yo sepa, problemas con nadie. Los temas que trato lo hago con objetividad y mucha delicadeza, que fue lo que me ensañaron en la escuela de periodismo. No me llega a la mente ningún tema o algo que hubiese dicho que fuese algo personal sobre alguien, que le ofendiera”, puntualizó.

Calificó el hecho como una emboscada y reiteró su llamado de protección a las autoridades. Anoche denunció el caso en la Policía.

Relató que pudo liberarse de sus atacantes al llegar su chofer y el conserje del edificio.

Esta mañana no había salido del impacto emocional. Tampoco había podido ir al médico a investigar el dolor de cabeza, que no ha cesado desde el incidente.