Dominicanos establecidos en el sector del Alto Manhattan en esta ciudad de Nueva York, en sus acostumbrados encuentros informales en las esquinas, restaurantes, bodegas, entre otros, están comentando insistentemente que el merenguero Antonio Peter de la Rosa (Omega) debe ser sometido en cuarentena como medida de precaución cuando regrese al país desde África, donde han muerto más de cuatro mil personas por el contagioso virus mortal Ébola.Hace algunos días Omega publicó dos fotos suyas en las redes sociales, explicando que su presencia en el continente africano se debe a negocios que realiza junto a su amigo Akon, el famoso rapero estadounidense. “No bulto, negocios, música, empresas, artistas, películas. Qué yo hago en África? Dios”, se cuestionó él mismo en su mensaje.
De inmediato, algunos de sus más de 67 mil seguidores expresaron el temor que sienten de que el artista sea contagiado por el virus y peor aún, que fuese el portador que lo trajese incubado a República Dominicana. “Es mejor la medicina preventiva que la curativa”, se le escucha decir con frecuencia a los criollos del vecindario dominicano en la Metrópoli.
Los quisqueyanos del Alto Manhattan especificaron que en Estados Unidos, las autoridades sanitarias han aislado cerca de un centenar de personas sin haber evidenciado síntomas del letal virus, asimismo los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) continúan monitoreando la situación.
El reconocido patólogo forense Sergio Sarita Valdez advirtió que el país debe prepararse por si en algún momento tiene una alarma de casos sospechosos de ébola, porque se trata de una enfermedad que es muy letal y tiene una mortalidad alta.
El doctor Sarita Valdez sostuvo que se deben tomar todas las medidas preventivas de lugar para evitar que si alguna persona con el virus, enferma o el síntoma de haberle estado comenzando el virus, se pueda mantener el caso limitado a ella y que no se le pase a otras personas.
El afamado médico alertó que el virus es altamente contagioso a través de todos los que sale o emana de las personas infectadas; las lágrimas, el sudor, las gotas de salivas, las excretas, orinas, heces fecales y el roce de la piel son elementos que contribuyen al contagio del ébola. “El contacto con cualquiera de estas partes, cualquier material que emane o salga de esa persona, si se pone en contacto con otra persona sana, se puede infectar”, sostuvo.
Por Ramón Mercedes
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