Subscribe Us

Inauguran microhidroeléctrica que beneficia a 345 personas en El Montazo de Azua

El proyecto, que suplirá 24 horas de energía, fue inaugurado este martes 24 de febrero, en un acto encabezado por dirigentes comunitarios, la presidenta de la Fundación Sur Futuro, Melba Segura de Grullón, el jefe de la Delegación de la Unión Europea, embajador Alberto Navarro y la Representante Residente Adjunta del PNUD, Luciana Mermet.

Unas 65 familias, 345 personas se beneficiarán de esta obra ejecutada por la Fundación Sur Futuro con el apoyo técnico y financiero de la Unión Europea, el Consejo Provincial de la Central Hidroeléctrica Los Toros, el gobierno dominicano a través de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INDRHI) y la Dirección General de Cooperación Multilateral (DIGECOOM). 

Además el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) a través del Programa de Electrificación Rural basado en fuentes de energía renovable (PER-Renovables) y el Programa de Pequeños Subsidios para el Medio Ambiente Mundial (SGP-GEF/UNDP). La comunidad de El Montazo fue protagonista clave en esta iniciativa al aportar su trabajo y prepararse para asumir la gestión de la microhidroeléctrica a través de una cooperativa.

Fruto de esta alianza entre comunidades, sociedad civil, gobierno y cooperación internacional que se logró en el marco del Programa de Electrificación Rural basado en fuentes de energía renovable (PER-Renovables) más de mil 300 familias se han beneficiado con la puesta en operación de 13 microhidroeléctricas, con una inversión de unos 3 millones de euros en un periodo de seis años.

En El Montazo la mayoría de las familias vive de la agricultura y la ganadería de subsistencia. Carecen de servicios básicos como carreteras, centros de salud y medios públicos de comunicación.

Con la llegada de la energía, ha cambiado la vida de esta comunidad. Antes de la puesta en operación de esta microhidroeléctrica, las familias utilizaban gas kerosene, velas, baterías para linternas y cuaba. Gastaban en promedio unos RD$400 al mes por familia en estas fuentes de energía y sufrían los impactos de la contaminación del aire.

Ahora disfrutan de una fuente de energía limpia y permanente; y tienen la oportunidad de desarrollar emprendimientos productivos que ayudarán a dinamizar la economía local. Cada familia paga por la electricidad que recibe y las familias de la comunidad se han organizado en una Cooperativa de Producción, Trabajo y Servicios Múltiples para administrar el sistema microhidroeléctrico y los recursos obtenidos.

Publicar un comentario

0 Comentarios