Santo Domingo, RD.- Free Fire, el popular videojuego móvil lanzado en 2017, se ha convertido en uno de los títulos más descargados a nivel mundial desde 2019. Su nivel de interactividad lo ha hecho muy atractivo para jóvenes y adultos, pero cuando se trata de menores de edad, su uso sin la supervisión adecuada podría tener graves consecuencias.
Recientemente, la desaparición de dos adolescentes de 13 años en Santiago, quienes habrían planeado un encuentro con un desconocido tras comunicarse a través de Free Fire, ha encendido las alarmas sobre los peligros que representa este videojuego en manos de menores sin control adulto.
Free Fire es un videojuego interactivo en línea, de tipo battle royale, donde los jugadores compiten entre sí en un entorno virtual. La aplicación tiene una capacidad adaptativa, lo que significa que puede ser jugada en teléfonos móviles de diferentes gamas, incluyendo aquellos con precios accesibles, desde cinco mil pesos, lo que aumenta su accesibilidad para los más jóvenes.
El experto en tecnología, Juan Medina, destaca que la interactividad del juego es lo que lo hace tan atractivo, pero también es lo que puede resultar riesgoso para los menores. "El nivel de comunicación que permite el juego, donde los usuarios pueden hablar entre sí, a veces con desconocidos, representa un peligro si no se supervisa adecuadamente", señala Medina.
A pesar de que Free Fire no cuenta con regulaciones específicas para hacer el juego más seguro para los niños, Medina recomienda que los padres implementen control parental en los dispositivos electrónicos. Este tipo de medidas ayudan a restringir el acceso a contenidos no adecuados y a limitar la interacción con extraños dentro del juego.
Es crucial que los adultos presten atención a las actividades de los menores en línea, especialmente en plataformas tan interactivas como Free Fire. "La falta de supervisión puede llevar a situaciones peligrosas, como el contacto con personas desconocidas o el fomento de conductas de riesgo", alerta Medina.
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