Dice que a sus 68 años recibir docencia con adolescentes no fue fácil, pero como tenía bien claros sus objetivos, logró ganarse el respeto de todos sus jóvenes compañeros.
“Ayudar a transformar” es el término que utiliza la señora Alejandrina Lantigua Pérez, para definir la misión que ha asumido en esta sociedad. A sus 68 años logró graduarse de bachillerato, luego de pasar con notas sobresalientes las pruebas nacionales de cuarto de media que aseguran a los estudiantes su paso a la universidad.
Ella asegura que en los cinco continentes no existe un ser humano más feliz que ella. “Voy hacia donde yo quiero, a estudiar Derecho”, enfatiza emocionada.
La primera dama, Margarita Cedeño de Fernández, organizó un día especial para esta distinguida señora, quien junto a cuatro de sus cinco hijos tuvo la oportunidad de conocer el Palacio Nacional, recorrer la Biblioteca Infantil y Juvenil República Dominicana, para finalizar en el Despacho de la Primera Dama (DPD) compartiendo un almuerzo con la esposa del primer Mandatario de la nación y algunos ministros.
La Dama felicitó cálidamente a la señora Alejandrina Lantigua y le confesó que fue grato conocerla, que se mantendrá en contacto ella y que puede contar con su apoyo.
Mientras, la graduanda, con mucha fluidez y desenvolvimiento al hablar, dijo sentirse agradecida con la Primera Dama y aseguró que “mejor de ahí de daña”, refiriéndose al agasajo.
Alejandrina también recibió los parabienes del Ministro de Educación, Melanio Paredes; de la Ministra de la Mujer, Alejandrina Germán; de la directora del Consejo Nacional de Envejecientes, Natalí Maria, y de funcionarios del DPD presentes en el almuerzo
Alejandrina Lantigua asegura que terminó sus estudios de bachillerato motivada con la idea de ser alguien en la vida porque, según su convicción, los caminos malos no conducen a nada agradable y la educación es fundamental en el hogar y en la escuela, ya que ningún país se desarrolla sin recibir el pan de la enseñanza.
Confiesa que con sus 68 años de edad recibir docencia con adolescentes no fue fácil, pero como tenía bien definidos sus objetivos, logró ganarse el respeto de todos sus jóvenes compañeros.
Lantigua Pérez exhorta a los jóvenes y madres que no se motivan seguir estudiando a que vuelvan a las aulas porque un país no se desarrolla sin educación, es presa de la ignorancia y que cualquiera lo maneja a su antojo por lo que cree firmemente en la educación.
Alejandrina es enfática cuando afirma que los niños, niñas y los jóvenes de hoy en día deben ser educados en valores y esos valores deben recibirlos en la familia, asegurando que aunque vive en el barrio Capotillo sus hijos están formados en valores y marcan la diferencia entre los demás jóvenes del sector.
Hamlet Adoni, su hijo menor, asegura que su madre los ha educado con el ejemplo, mientras que Carlos Francisco Barrera Lantigua, su tercer hijo y profesor de educación media, expresa que él es un ejemplo para sus alumnos, lo debe a la formación que ha recibido en su familia.
La Primera Dama, Alejandrina y sus hijos Alberto, Carlos, Ubaldo y Hamlet, compartieron en un ambiente de familiaridad, conversaron sobre diferentes temas, principalmente sobre la superación personal, la educación en valores y la vocación de servicio hacia los demás.
A petición de la doctora Margarita Cedeño de Fernández, Lantigua compartirá sus conocimientos de formación en valores, superación personal y liderazgo en un liderazgo comunitario Centro de Desarrollo Integral y Tecnológico Progresando Seguro, en su barrio de Capotillo, donde fungirá como facilitadora o consejera de niños, niñas y jóvenes.
También recibirá la Tarjeta Solidaridad y todos los beneficios que le corresponde como familia y como estudiante. Además, al padre de sus hijos, Leonardo Barreras, como remuneración del ejemplo que le ha dado a sus hijos de que el trabajo y la seriedad gratifica al hombre, se le ampliará su pequeña Sastrería para que sus hijos lo apoyen en el oficio.
Un poco de su historia
Oriunda de Pontón, La Vega y residente en uno de los barrios de la parte alta de la capital, Capotillo, esta estudiante retomó sus estudios a los 50 años de edad en el tercero de Básica en la Escuela Radiofónica Santa Maria. Concluyó sus estudios de media en el Liceo Nocturno Pedro Henríquez Ureña, ubicado en la Yolanda Guzmán en el Barrio Capotillo e iniciará, en el mes de septiembre, una licenciatura en Derecho en la Universidad de la Tercera Edad.
Fotos:
Alejandrina Lantigua conversan amenamente con la Primera Dama durante el almuerzo realizado en su honor.
Margarita Cedeño de Fernández, Alejandrina Lantigua y sus cuatro hijos, Carlos Francisco, Hamlet Adonni,Alberto Alejandro y Ubaldo Enríquez Barreras Lantigua.
Director del Liceo Nocturno Pedro Henríquez Ureña, licenciado Toribio Suárez, Carlos Francisco Barrera Lantigua, Hamlet Adonni Barrera Lantigua, Ministra de la Mujer, Alejandrina Germán, la estudiante Alejandrina Lantigua, Primera Dama, Margarita Cedeño de Fernández, Ministro de Educación, Melanio Paredes, Alberto Alejandro y Ubaldo Enríquez Barreras Lantigua.
0 Comentarios