La librería Cuesta realizó conversatorio sobre novela “Un silencio que camina”, de Mateo Morrison.
Verónica Sención, directora del Foro Pedro Mir de la Librería Cuesta, tuvo a su cargo las palabras de bienvenida en la que destacó la buena crítica por parte de los literatos del país con respecto a la obra, desde su aparición.
El escritor, poeta y ensayista radicado en Nueva York, Héctor Miolán, fue el primero en hablar sobre “Un silencio que camina”, y lo hizo de una forma detallada, enfocándose en la vida de Mario Watson, uno de los personajes centrales de la novela.
Miolán dijo que a pesar de que es una obra corta, “Un silencio que camina” entra en la clasificación de novela. “Yo nunca creo que porque una obra tenga 110 ó 150 páginas, entra en la clasificación de novela; este texto entra en la clasificación porque tiene el desarrollo, lo que se llama la topografía, la intensidad, no extensión, en que se está desarrollando esta historia”, apuntó.
En el conversatorio, Mateo Morrison leyó dos capítulos de su obra para luego responder preguntas de los presentes.
El libro, puesto a la venta en la librería Cuesta, cuenta la historia de la relación triangular que dos amigos, Mario y Momón, mantienen, cada uno por su parte, con Teresa, una jovencita de su misma región.
Los dos están enamorados de ella sin saber que el otro alberga por la misma joven sentimientos parecidos, hasta el momento del inicio de las vacaciones que se anuncia en el primer párrafo del texto.
Este descubrimiento desencadena en los dos jovencitos una serie de reacciones que Morrison va narrando de manera impecable a lo largo de los diecisiete capítulos de la novela, y que degenerará en un enfrentamiento que escandalizará al pequeño poblado rural donde viven.
La mayor parte de la acción contada, sin embargo, se inscribe en el marco de la evocación que hace el narrador de la interminable caminata silenciosa que realizaron él y Momón en compañía de Teresa en dirección a cierto paraje de Catalina Arriba, famoso por ser lugar de encuentro de los enamorados. Está demás decir que esta caminata es lo que da origen al título de la novela: “Un silencio que camina”.
Así describe la trama Manuel García-Cartagena, doctor en letras y escritor, quien tuvo a su cargo el año pasado la presentación de esta historia de amor y engaño.
Al conversatorio asistieron escritores de distintos géneros literarios así como amigos del autor.
Verónica Sención, directora del Foro Pedro Mir de la Librería Cuesta, tuvo a su cargo las palabras de bienvenida en la que destacó la buena crítica por parte de los literatos del país con respecto a la obra, desde su aparición.
El escritor, poeta y ensayista radicado en Nueva York, Héctor Miolán, fue el primero en hablar sobre “Un silencio que camina”, y lo hizo de una forma detallada, enfocándose en la vida de Mario Watson, uno de los personajes centrales de la novela.
Miolán dijo que a pesar de que es una obra corta, “Un silencio que camina” entra en la clasificación de novela. “Yo nunca creo que porque una obra tenga 110 ó 150 páginas, entra en la clasificación de novela; este texto entra en la clasificación porque tiene el desarrollo, lo que se llama la topografía, la intensidad, no extensión, en que se está desarrollando esta historia”, apuntó.
En el conversatorio, Mateo Morrison leyó dos capítulos de su obra para luego responder preguntas de los presentes.
El libro, puesto a la venta en la librería Cuesta, cuenta la historia de la relación triangular que dos amigos, Mario y Momón, mantienen, cada uno por su parte, con Teresa, una jovencita de su misma región.
Los dos están enamorados de ella sin saber que el otro alberga por la misma joven sentimientos parecidos, hasta el momento del inicio de las vacaciones que se anuncia en el primer párrafo del texto.
Este descubrimiento desencadena en los dos jovencitos una serie de reacciones que Morrison va narrando de manera impecable a lo largo de los diecisiete capítulos de la novela, y que degenerará en un enfrentamiento que escandalizará al pequeño poblado rural donde viven.
La mayor parte de la acción contada, sin embargo, se inscribe en el marco de la evocación que hace el narrador de la interminable caminata silenciosa que realizaron él y Momón en compañía de Teresa en dirección a cierto paraje de Catalina Arriba, famoso por ser lugar de encuentro de los enamorados. Está demás decir que esta caminata es lo que da origen al título de la novela: “Un silencio que camina”.
Así describe la trama Manuel García-Cartagena, doctor en letras y escritor, quien tuvo a su cargo el año pasado la presentación de esta historia de amor y engaño.
Al conversatorio asistieron escritores de distintos géneros literarios así como amigos del autor.
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